El cine es una de las cuestiones que ayuda de una manera más poderosa a expandir una idea, una cultura, un lenguaje o una religión. Se trata de uno de los mayores altavoces de los que disponemos en la sociedad moderna. Dispone de un público objetivo que es de cientos de millones de personas y eso es lo que le convierte en una cuestión de principal relevancia para la expansión de esas cuestiones que os hemos comentado. Hace años que los grandes cineastas se empezaron a dar cuenta de ello y ahora, con la repercusión que están proporcionando plataformas como Amazon o Netflix para distintas películas, esa relevancia es todavía mayor.
Por todo eso, el cine ha servido en muchas ocasiones también para mostrar algún aspecto de la vida que es desconocido para el ser humano en términos generales. El esoterismo es una de esas cuestiones y, cada vez en una medida mayor, los directores y directoras de cine han procurado incorporar este tema a sus argumentos. Es cierto que en muchas ocasiones es difícil porque no hay tantos expertos en esoterismo como en Historia, por ejemplo, pero eso no ha impedido que la calidad de este tipo de películas sea muy grande.
El portal web Film About It informaba en una de sus noticias un ranking con películas que tienen que ver con el esoterismo o la religión. La lista, como podéis ver si accedéis a ese enlace, es bastante considerable y la puntuación de esas películas es también muy importante. Y es que el esoterismo es una de las cuestiones que más llaman la atención de la gente en los momentos en los que nos encontramos. Desde luego, está claro que hablamos de uno de los ganchos de referencia en la temática del cine actual.
El principal motivo que explica que el esoterismo llame la atención entre los cinéfilos en la actualidad es que tiene el componente de misterio que siempre nos deja con la intriga. Con otro tipo de sinopsis y argumentos es más difícil conseguir esa intriga. Hoy en día, cuando existe una película que presenta una realidad, digamos, oscura, la crítica y la respuesta de la gente suele ser buena en términos generales. A fin de cuentas, eso es lo que más importa a la hora de valorar si un filme es mejor o peor.
Gracias a la expansión de un asunto como el esoterismo en el mundo del cine, ha crecido de un modo exponencial la cantidad de personas que ha empezado a mostrar interés en lo que respecta a este tema, que hasta hace no mucho era prácticamente tabú en un país como el nuestro. Los profesionales de El Árbol de la Vida 5 nos han indicado que la mayoría de sus clientes tienen una película que les ha servido de base para comenzar a entender de qué trata y qué aspectos toca el esoterismo. Y esos clientes son de lo más heterogéneos: los hay desde muy jóvenes hasta ancianos.
La literatura también es otro foco importante de expansión
El cine puede ser un medio de exposición muy importante ya no solo para el esoterismo, sino también para cualquier aspecto que podamos imaginar. En un mundo en el que casi ha dejado de haber temas tabúes, disponer de alguna película que tenga que ver con un asunto en concreto es básico para que esa ciencia, cultura, lengua… tenga su sitio en el imaginario colectivo. Pero el cine también se ve apoyado en otra serie de artes. La literatura es una de las más importantes.
Según una noticia a la que hemos tenido acceso gracias al diario El País, la literatura esotérica estaba de moda entre los jóvenes ya a finales de los años 80. Y lo cierto es que sigue siendo una de las preferidas por los jóvenes y por todas esas personas que la leyeron en ese momento y que ahora tienen entre 50 y 60 años. Eso también ha hecho posible que el esoterismo crezca y se haya normalizado en la sociedad en la que nos encontramos. No cabe duda de que eso ha contribuido a dotar a nuestras artes de una mayor variedad de temas y a que estas, por tanto, sean más ricas y llamativas.
No es bueno tener tabúes en ningún sentido. El ser humano debe tener la capacidad de hablar y mostrar cualquier cosa sin tener por ello el miedo al qué dirán o a lo que pueda llegar a pensar alguien de ellos. El esoterismo ha ‘salido del armario’ en España y también en un montón de países y lo ha hecho gracias, entre otras cosas, a ese efecto multiplicador que genera el cine y que sirve en muchas ocasiones para que la sociedad ponga el foco en un aspecto que sea interesante conocer.